¿Y vosotros, quién decís que soy Yo?: Comentario P. Jorge Miró

Domingo 27 agosto 2023

frayjaviergarza © Cathopic

El P. Jorge Miró comparte con los lectores de Exaudi su comentario sobre el Evangelio de hoy 27 de agosto de 2023, titulado “¿Y vosotros, quién decís que soy Yo?”.

***

El Señor nos dirige hoy, como a los discípulos, dos preguntas importantes, especialmente la segunda: ¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre? ¿Y vosotros quién decís que soy yo?

Ante la primera pregunta, hoy también escucharíamos repuestas dispares.

Pero la pregunta fundamental es que respondas tú: ¿quién es Jesús para ti? En la respuesta que des a esta pregunta, te va la vida.

¿Qué relación tienes con Jesucristo? Porque ante el Señor, podemos ser curiosos, simpatizantes, eruditos…

Pero sólo hay una respuesta que, de verdad, merece la pena y cambia tu vida para bien. Es la respuesta que da Pedro: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios vivo.

Y que puedas decirle al Señor que eres mucho más que un simpatizante: soy discípulo; es decir, un ‘aprendiz’ que estoy a los pies del Maestro, escuchando cada día su voz y siguiéndole a donde quiera que vaya.

Jesucristo es el tesoro por el que vale la pena venderlo todo. Él es el Salvador, el Mesías, el único que puede llenar del todo tu corazón sediento de felicidad y de vida.


Pero eso sólo lo puede decir aquél que tiene el Espíritu Santo en su corazón. Por eso, ¡pide cada día el don del Espíritu Santo! Pide que te enamore de Jesucristo.

Además, en este Evangelio el Señor nos habla de la Iglesia: Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella.

Dios no te ha creado para la soledad, sino para la relación y para la comunión. No puedes vivir la fe en solitario.

Nos ha llamado a vivir la fe en una familia, en un pueblo, en su Cuerpo, que es la Iglesia: Nadie puede tener a Dios por Padre si no tiene a la Iglesia por Madre (San Cipriano).

La Iglesia, será ferozmente atacada por el Maligno, pero el poder del infierno no la derrotará.

Debemos vivir siempre en la confianza de que, aunque la barca sea zarandeada, Jesucristo es el que la conduce y custodia.

Hemos de valorar la misión del Papa, cabeza de la Iglesia. Es necesario que cada día ames más a la Iglesia, que ames más al Papa y trates de escuchar su enseñanza y llevarla a la práctica; que reces cada día pidiendo a Dios por el Papa y los demás pastores de la Iglesia, en la tremenda responsabilidad que tienen de guiar al pueblo de Dios hasta la vida eterna.

¡Ven Espíritu Santo! (cf. _Lc_ 11, 13).