Siguiendo el programa de celebraciones de la Semana Santa de 2021, otro curso litúrgico más marcado por la pandemia, a las 21 horas de hoy, el Papa Francisco ha presidido el Via Crucis del Viernes Santo en la plaza de San Pedro, y ha estado acompañado por veinte niños y jóvenes de Roma y la población de Foligno.
Acompañantes y participantes
Tal y como adelantó Vatican News, son muchos más los pequeños que han participado en la preparación de las meditaciones de este año, siendo cuatro de ellos los que las han leído en una plaza casi vacía, al igual que en el año 2020, por el impacto de la COVID-19.
40 niños y jóvenes más han estado entre el público situado en la zona del atrio de la Basílica Vaticana, todos ellos representantes de los 500 niños de la catequesis de primera Comunión y Confirmación de la parroquia romana de los Santos Mártires de Uganda y del grupo Scout Agesci “Foligno I”, sin olvidar a los 30 pequeños de la casa familiar romana Tetto Casal Fattoria y a los ocho, de entre tres y ocho años, de la casa Matter Divini Amoris.
Lectores y portadores
Además de los cuatro lectores, uno por cada institución educativa implicada, junto al Santo Padre han estado ocho jóvenes portadores de la Cruz y ocho más que han sostenido las antorchas a lo largo del recorrido de las 14 estaciones que, al igual que el año pasado, han trazado un círculo alrededor del obelisco de la plaza de San Pedro.
La gran diferencia respecto a 2020 es que, en esta ocasión, junto al Papa no ha habido médicos ni enfermeras que trabajan en primera línea frente a la COVID, ni un ex detenido, un capellán de la cárcel o algunos guardias de la prisión Due Palazzi, sino que han sido los más pequeños de la catequesis del padre Luigi D’Errico, párroco de la iglesia de los Mártires de Uganda en el barrio Ardeatino.
Saludo espontáneo
Después de participar del recorrido de las 14 estaciones del Via Crucis y tras escuchar la oración final, un grupo de niños ha acudido espontáneamente a Francisco para saludarle, para luego quedarse unos minutos hablando.
Seguidamente, el Sucesor de Pedro ha interrumpido su trayecto a la Basílica Vaticana para saludar a unas hermanas religiosas encargadas de un gran número de niños y niñas en riesgo social que viven en casas de acogida en la periferia de Roma.
Encargo de las meditaciones
Según informó Matteo Bruni, director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el pasado martes 23 de marzo, el Obispo de Roma encargó la preparación de las meditaciones del Via Crucis del Viernes Santo al grupo Scout Agesci “Foligno I” (Umbría) y a la parroquia romana de los Santos Mártires de Uganda.
Asimismo, las imágenes que han acompañado a las diferentes estaciones son dibujos realizados por niños y jóvenes de la Casa Familiar Mater Divini Amoris y de la Casa Familiar Tetto Casal Fattoria.
Grupo Scout Agesci “Foligno I”
El grupo Scout Agesci “Foligno I” está formado por 21 educadores y 145 niños de entre ocho y 19 años. Los jóvenes autores del Via Crucis 2021 reflexionan sobre las 14 estaciones, relacionándolas también con sus propias experiencias cotidianas.
En consonancia con el método educativo y con los valores cristianos propuestos por Agesci, el grupo Foligno emplea herramientas como el juego, la vida al aire libre y el servicio a los demás para contribuir al crecimiento de niños y jóvenes.
Iglesia Santos Mártires de Uganda
Don Luigi D’Errico es un referente diocesano de la pastoral de las personas con discapacidad. Su realidad parroquial, donde desde hace tiempo se lleva a cabo una experiencia de catequesis para y con personas con discapacidad, cuenta con varias expresiones de proximidad.
Entre ellas están las casas familiares “Refugio para Agar”, dedicadas a las mujeres y los niños víctimas de malos tratos, o la “Casa de Belén”, que acoge a familias sin hogar en colaboración con las ocho parroquias de la XXII Prefectura de la diócesis de la capital.
En esta realidad solidaria, unos 500 niños y jóvenes de la catequesis de primera Comunión y Confirmación han ayudado a dar forma a las meditaciones, incluso con reuniones a distancia, cuando las recomendaciones sanitarias para la pandemia no les permitieron reunirse en la parroquia.
Autores de los dibujos
La Casa Familiar Mater Divini Amoris está dirigida en Roma por la Congregación de las Hijas de Nuestra Señora del Divino Amor. Siguiendo los pasos de su fundador, el padre Umberto Terenzi, acogen a sus huéspedes menores en el espíritu del apostolado mariano. Actualmente, la estructura cuenta con ocho niños de entre tres y ocho años de edad.
La Casa Familiar Tetto Casal Fattoria trabaja en la capital italiana desde 1984 para combatir las dificultades de los niños y jóvenes. Nacida como asociación voluntaria, desde 2019 es una cooperativa social. Las actividades de recepción están estructuradas y enriquecidas con proyectos de asistencia, apoyo, formación profesional y cultural, con el objetivo de acompañar en el crecimiento y la construcción de un proyecto de vida.
