El Papa Francisco y el arzobispo de Polonia monseñor Stanisław Gadecki han hablado hoy de los refugiados ucranianos en un encuentro de 45 minutos en el Vaticano.
El Santo Padre recibió al presidente de la Conferencia Episcopal Polaca. Un punto clave fue cómo ayudar a unos 2 millones de refugiados ucranianos que han huido de la invasión rusa, siendo Polonia el principal destino. También hablaron de los que intentan cruzar ilegalmente la frontera polaca desde el lado de Bielorrusia.
Durante el encuentro con el Santo Padre, Mons. Stanisław Gadecki también abordó el tema de la llamada “vía sinodal alemana”, con la que, como el propio Papa señaló, presenta una gran distancia, viendo en ella un giro hacia la protestantización de la Iglesia, a la que a menudo se oponen los propios protestantes.
Durante su visita a la Radio Vaticana, el Metropolitano de Poznań aseguró el “gran aprecio de Francisco por la apertura de los polacos a la acogida de los refugiados de Ucrania, pero también llamó la atención sobre la necesidad de ayuda a largo plazo, cuando su estancia se prolongue y se convierta en una cierta molestia”. El arzobispo Gadecki también señaló que las iglesias de Polonia siguen abiertas a la celebración del rito oriental.
“En lo que respecta a los greco-católicos, siguen formando parte de la Iglesia Católica, por lo que ambos servicios, escuchar las confesiones en ucraniano y la liturgia, todo esto es posible y confío en que se encuentren con la amabilidad de los obispos polacos y las parroquias polacas”, subrayó el arzobispo Gadecki. “En cuanto a la Iglesia ortodoxa, tenemos que ser abiertos aquí, es decir, permitir a los ortodoxos tener la liturgia en ucraniano o en ruso, sabiendo de las fricciones que existen entre la Iglesia de Moscú y la Iglesia ortodoxa ucraniana”. Las personas que se encuentran en Polonia parecen ahora mucho más abiertas a la ortodoxia y a la fe greco-católica que en Ucrania. De estas conversaciones con el clero ortodoxo y ucraniano se desprende que, de repente, ven una apertura que antes no existía.
Según el metropolitano de Poznań, la visita del patriarca Bartolomé a Polonia debe mostrar claramente que, aparte de la ortodoxia, que apoya la intervención rusa en Ucrania, hay una ortodoxia que se apega al Evangelio y no está en la “olla del Estado”.