Perú: Mensaje de obispos ante elecciones generales 2021

El próximo 11 de abril

Perú obispos elecciones 2021
Obispos de Perú © Conferencia Episcopal Peruana

Con motivo de las próximas elecciones generales 2021 en Perú, que tendrán lugar el domingo 11 de abril, los obispos del país enviaron un mensaje difundido hoy, 16 de marzo de 2021. En él, realizan un llamado a los partidos políticos y sus candidatos “para que destierren de las campañas electorales los epítetos humillantes y las ofensas a sus rivales y prioricen la presentación de propuestas no demagógicas sino serias y viables, manteniendo siempre abiertas las posibilidades de un diálogo respetuoso con los diversos actores de la vida social, económica, cultural, educativa y política del país”. Y piden Pedimos a los medios de comunicación “que colaboren con este objetivo”.

“La política que se necesita”

El texto, titulado “La política que se necesita” (Cfr. Papa Francisco, Enc. Fratelli tutti, 177), recuerda que se celebran las elecciones generales del Bicentenario “en medio de una de las peores crisis de nuestra vida republicana. Tal vez sea la peor porque es una crisis pluridimensional: sanitaria, económica, moral, educativa y política, que afecta gravemente nuestro presente y puede afectar más gravemente aun nuestro futuro como nación”.

Ante esta realidad, los candidatos “tienen una responsabilidad mayor que quienes los precedieron en elecciones pasadas. No sólo porque un buen grupo de ellos tendrá la tarea de guiar el destino inmediato del país desde el Poder Ejecutivo y el Congreso, es decir el futuro de millones de familias con sus hijos, sino porque todos, salgan elegidos o no, tienen hoy la posibilidad de cooperar en la necesaria rehabilitación de la política y el fortalecimiento de la sociedad”, se lee en el texto.

Asimismo, los los miembros de la Conferencia Episcopal Peruana señalan que “el elevado nivel de corrupción” unido “a los intentos de introducir en nuestro Perú ideologías extranjeras contrarias a la familia y la vida”, reflejan que la clase política, salvo excepciones, “se ha vuelto autorreferencial y vive de espaldas al pueblo”.

Candidatos honestos y responsables


Ante esta situación, los prelados denuncian que “se corre el riesgo de que el pueblo peruano pierda la esperanza y caiga en una depresión colectiva respecto a la política, lo cual sería muy grave porque la magnitud de la crisis que aflige al país es tan grande que ningún candidato o partido podrá sacarnos de ella por sí solo” y que es necesario “el trabajo y esfuerzo conjunto de todos los peruanos, porque de esta crisis pluridimensional salimos juntos o no salimos”.

La buena política, prosiguen, “requiere candidatos honestos y responsables, con espíritu de servicio, capaces de dialogar y de tender puentes a favor del bien común, que es el bien de todos y de cada uno de los que formamos parte de este Perú”.  Asimismo, el mensaje habla de “una política que no se subordine a la economía ni al paradigma eficientista de la tecnocracia, sino que la oriente como parte de un proyecto mayor de desarrollo humano integral sostenido y sostenible, en el que se atienda de modo preferencial a los pobres”.

Responsabilidad de la ciudadanía

Por otro lado, los pastores invocan a la ciudadanía a no dejarse llevar por “un febril intercambio de opiniones en las redes sociales, muchas veces orientado por información mediática no siempre confiable…quizás imponiéndose a los demás por sus tonos altos y agresivos” (Fratelli tutti, 200)” y   recuerdan que  votar es un deber que nos incumbe a todos”, siendo necesario prepararse “para emitir un voto consciente e informado, sopesando los problemas coyunturales y estructurales que afectan a nuestro Perú, y evaluando la capacidad que los candidatos puedan tener para resolverlos y las garantías que nos puedan brindar de que así lo harán”.

“Estamos convencidos de que es posible que en nuestro país la política llegue a ser el grado más alto de la caridad”, describen, algo que precisa “líderes que vivan con pasión su vocación de servir al pueblo al que representan” y “capaces de promover una cultura del encuentro y la amistad social, poniendo en el centro a la persona humana, la familia y la comunidad”.

Las próximas elecciones generales constituyen, por tanto, “una ocasión propicia para retomar la senda de la buena política y fortalecer nuestro régimen democrático, de modo que las celebraciones del bicentenario de nuestra independencia nacional sean un hito en nuestro proceso histórico de búsqueda de la justicia social, la paz y la fraternidad”, resalta el mensaje del episcopado.