El Papa Francisco ha visitado a Edith Bruck, una superviviente del Holocausto. Lo ha hecho en una excursión sorpresa desde la Ciudad del Vaticano hasta el centro de Roma.
Según refleja una nota del 20 de febrero del director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, a los periodistas acreditados, afirmó lo siguiente: “Esta tarde, a las 16 horas, el Santo Padre ha visitado a la poeta y superviviente del Holocausto, la señora Edith Bruck, en su casa de Roma”.
La escritora de origen húngaro, nacida Edith Steinschreiber en el seno de una familia judía pobre de Tiszabercel, fue deportada en 1944 a Auschwitz, junto con sus padres y la mayoría de sus hermanos. Tras su paso por el campo de concentración cuando era niña, vivió en varios países y se instaló en Italia en 1954.
Italia se ha convertido en su hogar de adopción. Ha pasado la mayor parte de su vida en el país y escribe en italiano. Autora de novelas, poesía, relatos y películas, ha recibido varios premios literarios y sus obras han sido traducidas a múltiples idiomas.
“La conversación con el Papa”, explicó el portavoz del Vaticano, “rememoró aquellos momentos de luz que marcaron la experiencia del infierno de los campos de concentración” y “evocó temores y esperanzas para el tiempo que vivimos”.
“Subrayando el valor de la memoria y el papel de los ancianos en su cultivo”, Francisco y Bruck destacaron el papel de los más mayores en la transmisión de los recuerdos de esta trágica historia a las generaciones futuras.
Después de una hora, el Pontífice y la señora Bruck se despidieron y el Obispo de Roma regresó al Vaticano.
Los simpatizantes se reunieron fuera de la casa en Via Babuino (entre la icónica Piazza del Popolo de Roma y la Escalinata de España) una vez que se dieron cuenta de que el Sucesor de Pedro estaba en el interior, y esperaron a verle mientras se iba. Este saludó cordialmente a los reunidos.
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