La semana que acabamos de terminar es, para los que somos católicos, la fiesta más importante del año. A raíz de este acontecimiento y asociado al ejercicio desplegado en el taller que participé hace unos días, dictado por Estefanie Martens, en donde debíamos responder a la pregunta, “¿Imagina que estás en tu funeral y una persona muy querida va a decir unas palabras de ti qué quisieras que diga?”. Esto me hizo caer en la cuenta, que todos vamos a dejar este mundo.
Esto a su vez, trajo a mi mente, algunos dichos populares como,
- Todos tenemos nuestra cruz.
- La vida se pasa en un abrir y cerrar de ojos.
- Genio y figura, hasta la sepultura.
- La vida es dura, entre otros más.
Por esta razón en las siguientes líneas, de manera sencilla, te invito a reflexionar sobre tu vida, a partir de lo vivido por Jesús de Nazaret en esos últimos instantes en la tierra, según lo que dice la biblia acerca de su pasión.
- Mi alma, siente una tristeza de muerte. Que pensamientos y emociones tendremos cada uno de nosotros cuando estemos enfrentando nuestro momento. Miedo a lo desconocido o confianza por la vida vivida y el legado dejado.
- Dios mío, Dios mío, porqué me has abandonado. Es que nos quejaremos, con quien, a quién le diremos no quería esta enfermedad, este dolor, aún no es mi hora, me faltó hacer una cosa y decir discúlpame-perdóname a tal o cual persona.
- Simón de Cirene, ayudó a Jesús a cargar su cruz. Somos conscientes y agradecidos con los Cireneos que la vida en general nos ha dado. Y acaso, si hemos sido Cireneos con algún familiar, vecino, amigo, compañero de trabajo, etc.
- Soldado Romano que vio morir a Jesús, “En verdad este era el Hijo de Dios”. En nuestro caso, será que esa persona muy querida y que va a decir unas palabras sobre nosotros dirá lo que hubieras querido escuchar en nuestro funeral.
Como saben, vivo desde hace un tiempo en Buenos Aires y los argentinos tienen una arenga presente ante cualquier circunstancia. “V A M O S”, esto me hizo recordar parte de la letra de una canción nuestra popular, … Ánimo y aliento tengo yo en mi pensamiento… ánimo y aliento tengo yo en mi sentimiento…
Así que, manos a la obra querido lector, no esperes más, Ilumina tu mente, Ilusiona tu corazón y ponte ya a hacer realidad tu propósito de vida. Te invito a descubrir tus dones o capacidades, ponlos en práctica a través de tu vocación (profesión u oficio) hazlo con pasión y ponlo al servicio de los demás.
Finalmente, una frase de Pablo Picasso, que es música para nuestros oídos: “El significado de la vida es descubrir tu don, el propósito de la vida es regalarlo”.
¿Qué dices, seguimos remando contra corriente…?