Se habla comúnmente de ‘fake news’, y un ejemplo fue la noticia que corrió en las redes sociales llegando incluso a algunos periódicos poco serios, haciéndose viral. La misma se basaba en un mensaje de una cuenta tweet del Obispo alemán de Limburg, y presidente de la Conferencia Episcopal Alemana, Georg Bätzing, una cuenta que resultó falsa.
Las cuentas en Twitter las puede abrir cualquier persona, incluso hay muchas con nombres de actores famosos, del Vaticano, de un club de fútbol, incluso indicando que esa es la ‘oficial’, cuando en realidad no lo son.
Ante las falsas noticias ¿Cómo informarse bien?
Lo mejor es constatar en los medios de información serios, porque en una redacción, antes de publicar una noticia confirman la procedencia. O sea está la garantía del medio informativo y mejor aún si tiene la firma del periodista que da la noticia.
Aunque algunos medios, incluso cuando la noticia fue desmentida, titularon “Muere Benedicto XVI, papa emérito, a los 95 años, informa la Conferencia Episcopal Alemana”. Por el contrario al clicar la noticia precisan: “La realidad detrás de la supuesta muerte del papa emérito Benedicto XVI”. O sea que el primer título de carátula no es serio, sino simplemente un medio para captar visualizaciones, aunque la noticia explica que no ha muerto.
Otros medios, a pesar de que la información se ha revelado una “fake news”, han dejado el título para obtener clicks, y es bueno acordarse cuáles son para no seguirlos ni creerles. Otros periódicos ni siquiera la han publicado, porque no tiene base en la realidad, es pura fantasía y por lo tanto no merece ser publicada.
“Desde una cuenta falsa en Twitter se desata rumor sobre muerte del Papa Benedicto XVI” indica otro medio, más apoyado en la realidad.
El papa emérito desde su renuncia el 28 de febrero de 2013 vive en un monasterio dentro del Vaticano, ocasionalmente da alguna entrevista o recibe visitas. En las fotos se le ve muy anciano, pero lúcido y algunas declaraciones recientes demuestran que mantiene siempre esa mente brillante que le caracterizó y que inició las reformas en el Vaticano, que ahora está llevando adelante el Papa Francisco.