La Cuaresma es un tiempo de reflexión y renovación espiritual en el calendario litúrgico cristiano. Durante estas semanas, los fieles están invitados a realizar un examen de conciencia profundo para prepararse adecuadamente para la celebración de la Pascua. El Vaticano, a través de su Oficina de Celebraciones Litúrgicas, ofrece una guía detallada para este examen de conciencia, que se centra en tres aspectos fundamentales: el amor a Dios, el amor al prójimo y la búsqueda de la perfección espiritual.

El Amor a Dios

1. Orientación del Corazón hacia Dios: ¿Mi corazón está verdaderamente orientado hacia Dios? ¿Puedo decir que lo amo sobre todas las cosas y con amor de hijo, en la observancia fiel de sus mandamientos? ¿Me dejo absorber demasiado por las cosas temporales? ¿Es siempre recta mi intención al actuar?

2. Fortaleza de la Fe: ¿Es firme mi fe en Dios, que en su Hijo ha dirigido a nosotros su palabra? ¿He dado mi plena adhesión a la doctrina de la Iglesia? ¿He tenido en cuenta mi formación cristiana, escuchando la palabra de Dios, participando en la catequesis, evitando todo lo que pueda poner en peligro la fe? ¿He profesado siempre con valentía y sin temor mi fe en Dios y en la Iglesia? ¿He intentado demostrar que soy cristiano en la vida privada y pública?

3. Vida de Oración: ¿He rezado por la mañana y por la noche? ¿Y mi oración es un verdadero coloquio de corazón a corazón con Dios, o es solo una práctica externa vacía? ¿He sabido ofrecer a Dios mis ocupaciones, mis alegrías y mis dolores? ¿Recurro a él con confianza también en las tentaciones?

4. Reverencia hacia el Nombre de Dios: ¿Tengo reverencia y amor hacia el santo nombre de Dios, o lo he ofendido con la blasfemia, el falso juramento, nombrándolo en vano? ¿He sido irrespetuoso hacia la Virgen María y los Santos?

5. Santificación del Día del Señor: ¿Santifico el día del Señor y las fiestas de la Iglesia, participando con participación activa, atenta y piadosa en las celebraciones litúrgicas, y especialmente en la Santa Misa? ¿He evitado ejercer trabajo innecesario en los días festivos? ¿He observado el precepto de la confesión al menos anual y de la comunión pascual?

6. Evitar la Idolatría: ¿Hay para mí «otros dioses», es decir, expresiones o cosas de las que me intereso o en las que pongo más confianza que en Dios, por ejemplo: riqueza, supersticiones, espiritismo y otras formas de magia?

El Amor al Prójimo

1. Abuso y Trato Justo: ¿Amo verdaderamente a mi prójimo, o abuso de mis hermanos, sirviéndome de ellos para mis intereses y reservándoles un trato que no quisiera que se usara conmigo? ¿He dado escándalo con mis palabras o acciones?

2. Vida Familiar: En mi familia, ¿he contribuido con paciencia y con verdadero amor al bienestar y la serenidad de los demás?

   • Para los hijos: ¿He sido obediente a los padres, los he respetado y honrado? ¿He prestado ayuda en las necesidades espirituales y materiales? ¿Me he esforzado en la escuela? ¿He respetado a las autoridades? ¿He dado buen ejemplo en toda situación?

   • Para los padres: ¿Me he preocupado por la educación cristiana de los hijos? ¿He dado buen ejemplo? ¿Los he sostenido y dirigido con mi autoridad?

   • Para los cónyuges: ¿He sido siempre fiel en los afectos y en las acciones? ¿He tenido comprensión en los momentos de inquietud?

3. Generosidad y Ayuda a los Necesitados: ¿Sé dar de lo mío, sin egoísmo mezquino, a quien es más pobre que yo? ¿Por lo que depende de mí, defiendo a los oprimidos y ayudo a los necesitados? ¿O trato con suficiencia o con dureza a mi prójimo, especialmente a los pobres, los débiles, los ancianos, los marginados, los inmigrantes?

4. Participación en la Comunidad: ¿Soy consciente de la misión que se me ha confiado? ¿He participado en las obras de apostolado y caridad de la Iglesia, en las iniciativas y en la vida de la parroquia? ¿He rezado y ofrecido mi contribución para las necesidades de la Iglesia y del mundo, por ejemplo, por la unidad de la Iglesia, por la evangelización de los pueblos, por la instauración de la justicia y la paz?

5. Compromiso Cívico: ¿Tengo en cuenta el bienestar y la prosperidad de la comunidad humana en la que vivo o solo me preocupo por mis intereses personales? ¿Participo, en la medida de lo posible, en las iniciativas que promueven la justicia, la moralidad pública, la concordia, las obras de beneficencia? ¿He cumplido con mis deberes civiles? ¿He pagado regularmente los impuestos?

6. Justicia y Honestidad en el Trabajo: ¿Soy justo, comprometido, honesto en el trabajo, dispuesto a prestar mi servicio para el bien común? ¿He dado la justa merced a los obreros y a todos los subordinados? ¿He observado los contratos y cumplido las promesas?

7. Obediencia a las Autoridades: ¿He prestado a las legítimas autoridades la obediencia y el respeto debidos?

8. Liderazgo y Servicio: Si tengo algún cargo o desempeño funciones directivas, ¿me preocupo solo por mi propio beneficio o me esfuerzo por el bien de los demás, en espíritu de servicio?

9. Veracidad y Fidelidad: ¿He practicado la verdad y la fidelidad, o he causado daño al prójimo con mentiras, calumnias, detracciones, juicios temerarios, violación de secretos?

10. Respeto a la Vida y la Integridad Física: ¿He atentado contra la vida y la integridad física del prójimo, he ofendido su honor, he dañado sus bienes? ¿He procurado o aconsejado el aborto? ¿He callado en situaciones donde podía haber alentado al bien? ¿En la vida matrimonial soy respetuoso con la enseñanza de la Iglesia sobre la apertura a la vida y el respeto a ella? ¿He actuado contra mi integridad física (por ejemplo: esterilización)? ¿He sido siempre fiel también con la mente? ¿He guardado odio? ¿He sido pendenciero? ¿He pronunciado insultos y palabras ofensivas, fomentando rencillas y resentimientos? ¿He omitido culpablemente y egoístamente testimoniar la inocencia del prójimo? ¿Al conducir el coche o utilizar otros medios de transporte he puesto en peligro mi vida o la de los demás?

11. Honestidad y Restitución: ¿He robado? ¿He deseado injustamente la propiedad de otros? ¿He dañado al prójimo en sus bienes? ¿He restituido lo que he sustraído y he reparado los daños causados?

12. Perdón y Reconciliación: Si he recibido agravios, ¿me he mostrado dispuesto a la reconciliación y al perdón por amor a Cristo, o guardo en el corazón odio y deseo de venganza?

La Búsqueda de la Mejora Espiritual

1. Orientación Fundamental de la Vida: ¿Cuál es la orientación fundamental de mi vida? ¿Me animo con la esperanza de la vida eterna? ¿He intentado revivir mi vida espiritual con la oración, la lectura y la meditación de la palabra de Dios, la participación en los sacramentos? ¿He practicado la mortificación? ¿He estado dispuesto y decidido a erradicar los vicios, a someter las pasiones y las inclinaciones perversas? ¿He reaccionado a los motivos de envidia, he dominado la gula? ¿He sido presuntuoso y arrogante; he pretendido afirmar tanto a mí mismo que he despreciado a los demás y me he preferido a ellos? ¿He impuesto mi voluntad a los demás, conculcando su libertad y descuidando sus derechos?

2. Uso del Tiempo y los Talentos: ¿Qué uso he hecho del tiempo, de las fuerzas, de los dones recibidos de Dios como los «talentos del evangelio»? ¿Me sirvo de todos estos medios para crecer cada día más en la perfección de la vida espiritual y en el servicio al prójimo? ¿He sido inerte y perezoso? ¿Cómo utilizo internet y otros medios de comunicación social?

3. Paciencia y Mortificación: ¿He soportado con paciencia, en espíritu de fe, los dolores y las pruebas de la vida? ¿Cómo he intentado practicar la mortificación, para completar lo que falta a la pasión de Cristo? ¿He observado la ley del ayuno y la abstinencia?

4. Pureza y Castidad: ¿He conservado puro y casto mi cuerpo, en mi estado de vida, pensando que es templo del Espíritu Santo, destinado a la resurrección y a la gloria? ¿He custodiado mis sentidos y he evitado ensuciarme en el espíritu y en el cuerpo con pensamientos y deseos malos, con palabras y con acciones indignas? ¿Me he permitido lecturas, discursos, espectáculos, diversiones en contradicción con la honestidad humana y cristiana? ¿He sido escándalo para los demás con mi comportamiento?

5. Actuar contra la Conciencia: ¿He actuado contra la conciencia, por miedo o por hipocresía?

6. Libertad de los Hijos de Dios: ¿He intentado comportarme en todo y siempre en la verdadera libertad de los hijos de Dios y según la ley del Espíritu, o me he dejado esclavizar por mis pasiones?

7. Omisión del Bien: ¿He omitido un bien que era posible para mí realizar?

Este examen de conciencia proporcionado por el Vaticano es una herramienta invaluable para aquellos que desean profundizar en su relación con Dios y con los demás durante la Cuaresma. Al reflexionar sobre estas preguntas, los fieles pueden prepararse mejor para la celebración de la Pascua y vivir una vida más plena y significativa en comunión con Dios y su prójimo.