¿Qué dice la Iglesia Católica sobre la eutanasia?
La eutanasia, definida como la acción u omisión que causa la muerte de una persona para eliminar su sufrimiento, es considerada por la Iglesia Católica un acto intrínsecamente inmoral. Según la enseñanza de la Iglesia, cada vida humana tiene un valor único e irrepetible porque es creada a imagen y semejanza de Dios. Por ello, la eutanasia atenta contra la dignidad humana y contradice el mandamiento «No matarás».
El Catecismo de la Iglesia Católica (n. 2277) subraya que «cualquiera que sea su forma o sus motivos, la eutanasia constituye un homicidio gravemente contrario a la dignidad de la persona humana y al respeto del Dios vivo, su Creador».
La Iglesia promueve los cuidados paliativos como una alternativa ética y compasiva para aliviar el sufrimiento de las personas enfermas, respetando siempre su vida y dignidad.
Los últimos cinco Papas frente a la eutanasia
Pablo VI (1963-1978): Un defensor de la santidad de la vida
El Papa Pablo VI, en documentos como la encíclica Humanae Vitae (1968), reafirmó la inviolabilidad de la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural. Aunque este documento se centra principalmente en cuestiones de regulación de la natalidad, subraya la importancia de proteger la vida en todas sus etapas. Pablo VI señaló que cualquier acto que pretenda poner fin deliberadamente a una vida humana es moralmente inaceptable.
Juan Pablo I (1978): Breve pero claro en defensa de la vida
A pesar de su breve pontificado de solo 33 días, el Papa Juan Pablo I se mantuvo firme en la enseñanza tradicional de la Iglesia. En sus discursos, destacó la importancia de cuidar y proteger a los más vulnerables, rechazando cualquier forma de eutanasia como contraria a la ley de Dios.
Juan Pablo II (1978-2005): Un defensor incansable de la vida
El Papa Juan Pablo II dedicó gran parte de su pontificado a defender la vida humana en todas sus formas. En su encíclica Evangelium Vitae (1995), declaró:
“La eutanasia es una grave violación de la ley de Dios, en cuanto eliminación deliberada y moralmente inaceptable de una persona humana”.
El Pontífice subrayó que la verdadera compasión no consiste en eliminar el sufrimiento eliminando al que sufre, sino en compartir el dolor y ofrecer amor y apoyo. Propuso la promoción de una «cultura de la vida» frente a la «cultura de la muerte» que considera la eutanasia una solución aceptable.
Benedicto XVI (2005-2013): La importancia de los cuidados paliativos
El Papa Benedicto XVI continuó la enseñanza de sus predecesores, destacando que el sufrimiento puede encontrar sentido a la luz de la fe. En su encíclica Spe Salvi (2007), reflexionó sobre la esperanza cristiana en la vida eterna y la necesidad de acompañar a los enfermos con amor. Reiteró que los cuidados paliativos son una forma ética de aliviar el sufrimiento, respetando la dignidad de la persona hasta el final de su vida.
Francisco (2013-presente): Una voz clara contra la eutanasia
El Papa Francisco ha hablado en numerosas ocasiones contra la eutanasia y el suicidio asistido, calificándolos como «un fracaso para la humanidad». En 2020, aprobó la Carta Samaritanus Bonus, un documento que reafirma la oposición de la Iglesia a estas prácticas y aboga por el acompañamiento de los enfermos:
“La eutanasia y el suicidio asistido son una derrota para todos. El único camino humano es el cuidado”.
El Pontífice ha insistido en que la verdadera compasión se manifiesta en el amor y la proximidad hacia quienes sufren, no en la eliminación de sus vidas.
Alternativas propuestas por la Iglesia
La Iglesia Católica promueve una «cultura del cuidado» que prioriza la dignidad humana y el acompañamiento. Los cuidados paliativos se presentan como una solución ética y compasiva para quienes enfrentan enfermedades terminales, ofreciendo alivio del dolor físico y apoyo emocional y espiritual.
En palabras del Papa Francisco:
«El dolor nunca se vence con la muerte, sino con el amor».