El mensaje de esperanza del Papa Francisco llega al Polo Norte en un inédito paseo por el Ártico de la mano de Michael Haddad, un joven libanés que se mueve con un exoesqueleto debido a un accidente en su infancia. Haddad llevará consigo, como mensaje del Papa, una versión bendecida del libro ¿Por qué tienes miedo, no tienes fe? realizado especialmente en una edición especial por el Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede.
El encuentro ha sido coorganizado por el programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Embajada de Italia ante la Santa Sede, el Instituto para el Diálogo Global y la Cultura del Encuentro. Además contará con la participación del Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede y tendrá lugar el viernes 17 de diciembre a las 11 de la mañana horas en la sede de la Embajada en Roma.
Según una nota del Dicasterio para la Comunicación, al final del paseo, Haddad dejará el pequeño libro de seis por ocho centímetros en el búnker de semillas de Svalbard, el mayor y más seguro del mundo, situado en Noruega, a 1.300 kilómetros más allá del Círculo Polar Ártico.
La 1ª vez que un mensaje del Papa llega al Polo Norte
De este modo, por primera vez, un mensaje del Papa Francisco llegará al Polo Norte de la mano de un embajador de Italia de la mano de un embajador de buena voluntad y, como una semilla de esperanza, quedará para la posteridad en el mayor y más seguro refugio del mundo dedicado salvaguardar la biodiversidad del planeta.
Haddad, un símbolo de esperanza y fe, cuyo mensaje se centra en la necesidad de una acción urgente contra el cambio climático, el cuidado de nuestra casa común y la inclusión frente a la desigualdad, mostrará su compromiso al recibir el mensaje en un encuentro en la Embajada de Italia ante la Santa Sede.
“La esperanza es audaz, sabe mirar más allá de la comodidad personal, de las pequeñas certezas y compensaciones que estrechan el horizonte, para abrirse a los grandes ideales que hacen la vida más bella y digna. que estrechan el horizonte, para abrirse a los grandes ideales que hacen la vida más bella y digna” expresó el Papa en la encíclica de Fratelli Tutti.