El Cristo de Dalí en Roma prepara el Año Santo

Entre los objetivos: “que los turistas se vuelvan peregrinos”

En la centralísima Via del Corso de la ciudad de Roma -paso obligado de milles de turistas- se encuentra expuesto desde el 13 de mayo en la ‘Chiesa di San Marcello al Corso’ una famosa pintura al oleo: “El Cristo de Salvador Dalí,” cllamado también el “Cristo de Port lligat”.

La obra estará expuesta hasta el 23 de junio de este año, como una de las iniciativas que preparan el Jubileo del 2025, que verá la llegada de más de 32 millones de peregrinos en la Ciudad Eterna y que como explicó Mons. Fisichella esta semana,  se espera que gracias al Año Santo también “los turistas se vuelvan peregrinos”.

La obra de Salvador Dalí fue cedida para el evento por la Kelvingrove Art Gallery and Museum de Glasgow, en cambio el boceto dibujado por san Juan de la Cruz en Ávila a mediados del siglo XV -que fue de inspiración en 1951 para el pintor español-  procede del Monasterio de la Encarnación de dicha ciudad y se encuentra ahora ubicado a los pies del Cristo de Dalí.

En el cuadro, el artista catalán pinta la crucifixión vista desde lo alto, mostrando la espalda de Jesús crucificado y casi inclinado hacia abajo, cambiando la perspectiva en la que estamos acostumbrados a verlo. Y como si fuera visto por Dios Padre desde lo alto de los cielos, como lo había dibujado San Juan de la Cruz. En el fondo se ve la playa de Port Lligat, lugar en donde el pintor vivía. Fue su amigo el padre carmelita Bruno de Jesus-Marie, quien le hizo conocer a Dalí el bosquejo de San Juan de la Cruz.

“Este óleo sitúa al pintor en un momento muy especial de su carrera artística, a finales de los años 40, en plena reformulación de su pensamiento. y marca el inicio de un nuevo período, el del misticismo nuclear, en el que Dalí combina su interés por la física y el Renacimiento italiano con la religión y la espiritualidad católicas, y cuyo texto fundacional es el Manifiesto Místico del mismo 1951”, indica uno de los paneles.


Y precisa otro que “Tras un tiempo en el que el artista se había distanciado de la fe recibida a través de su madre, los acontecimientos de la Guerra Civil en España, junto con los descubrimientos de la física cuántica y una valoración crítica de la deriva expresionista y trágica de gran parte del arte contemporáneo, llevaron Dalí a reabrir su corazón a Jesucristo y al catolicismo, con la certeza de que la nueva ciencia manifiesta la inteligencia del Creador y la tensión de la materia física hacia la vida del Espíritu, y que sólo en Cristo se da un puerto de salvación a hombre náufrago”.

Algunas obras de Dalí están expuestas en el Vaticano y su autor fue recibido sea por Pio XII en 1949 que por san Juan XXIII en 1959.

En templo también se encuentra el Cristo policromado tallado en madera “que salvó a Roma de la gran peste” en el siglo XVI y que llevado a la Plaza de San Pedro en el Vaticano en el auge de la pandemia, vio al  papa Francisco pedir que terminara el coronavirus.

Allí sobre el altar se encuentra un enorme paño con las palabras  recibidas por san Juan de la Cruz en dicha ocasión: ““Si queréis una palabra de esperanza, fijad vuestra mirada sólo en Él. Encontrarás más de lo que deseas”.