El Padre Ángel Espinosa de los Monteros trae a los lectores de Exaudi en su sección Reflexiones, el tema «El camino de la felicidad»
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El padre Ángel Espinosa de los Monteros compartió con nosotros sus pensamientos sobre un tema tan fundamental como complicado: la felicidad. Este anhelo universal, presente en todos los seres humanos, es abordado por el padre Ángel desde una perspectiva profundamente humana y espiritual.
El padre Ángel comienza con una observación provocativa: «Imagínense si yo ahora mismo les dijera que yo soy más feliz que todos los que me están viendo, alguno hasta se enfadaría». Con esto, nos invita a cuestionar nuestras concepciones sobre la felicidad y a evitar comparaciones innecesarias. La felicidad no puede medirse simplemente por nuestras circunstancias externas, como el estado civil, la cantidad de hijos o la posesión de bienes materiales.
La Felicidad y la Percepción
El padre Ángel utiliza una metáfora poderosa para ilustrar su punto: «Para un hombre descalzo, la felicidad es un par de zapatos; para un hombre con zapatos viejos, es un par de zapatos nuevos; para un hombre con zapatos nuevos, es un par de zapatos más bonitos». Este ejemplo nos enseña a valorar lo que tenemos en lugar de centrarnos en lo que nos falta. Cada persona tiene una percepción distinta de la felicidad basada en sus propias experiencias y necesidades.
Lo que No da Felicidad
En su reflexión, el padre Ángel también enumera una serie de cosas que definitivamente no contribuyen a la felicidad: «El odio, la venganza, la violencia, el egoísmo, la guerra, el crimen, las dependencias…». Estas son fuentes de sufrimiento y desdicha, y alejarnos de ellas es un paso esencial hacia una vida más plena.
Alegrías Momentáneas vs. Felicidad Verdadera
Una distinción crucial que el padre Ángel hace es entre las alegrías momentáneas y la verdadera felicidad. «Me acabo de comprar una moto… no digas qué felicidad, es una alegría momentánea». Estas alegrías pueden ser pasajeras y, a veces, engañosas, ya que pueden llevar a desilusiones o incluso tragedias. La verdadera felicidad, según él, no se encuentra en posesiones o experiencias temporales, sino en algo más profundo y duradero.
El Camino hacia la Verdadera Felicidad
Para el padre Ángel, la verdadera felicidad solo se alcanzará plenamente en la vida eterna. Sin embargo, aquí en la tierra, podemos caminar hacia ella a través de la paz, el amor, el perdón, la sinceridad, la familia, la formación y, fundamentalmente, Dios. «Dios es el fundamento de todo lo que acabo de decir», afirma. Es Él quien nos da la paz, nos ayuda a ser honestos y a superar nuestros vicios.
Una Vida en Paz y Amor
El camino hacia la felicidad, según el padre Ángel, implica vivir en paz, perdonar, amar, ser generosos, comprender y ayudar a los demás. Estos valores nos ponen en el camino correcto, aunque nunca alcancemos la felicidad perfecta en esta vida. «Olvídate de las cosas y céntrate en los valores. Estás en el camino de la felicidad cuando eres una persona buena llena de Dios que vive en paz y lleno de amor».
Conclusión
La reflexión del padre Ángel Espinosa de los Monteros nos recuerda que la búsqueda de la felicidad es una jornada continua que se nutre de nuestros valores y de nuestra relación con Dios. Nos insta a dejar de compararnos con los demás y a enfocarnos en lo que realmente importa: ser personas buenas, llenas de amor y paz. «Hagamos todo el bien que podamos y que Dios los bendiga siempre», concluye, dejando una poderosa llamada a la acción para todos nosotros.
A continuación la reflexión completa:
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