El Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) y la Red CLAMOR enviaron el pasado 18 de junio un mensaje con motivo del Día Mundial del Refugiado, celebrado el domingo 20, en el que llaman a la comprensión y empatía hacia las personas que actualmente atraviesan estas circunstancias.
En su nota, CELAM y CLAMOR explican que este día internacional “el mundo entero está invitado a visibilizar y dar respuestas a la realidad de quienes, siendo víctima de la violencia en sus distintas formas, pero particularmente de la violencia Estatal, solicitan protección a sus derechos humanos y oportunidades de desarrollo en otros países”.
Sentido de pertenencia
El mensaje señala que “refugiado puede ser sinónimo de vulnerabilidad y expresión de lo que el Papa Francisco llama ‘periferias existenciales’, pero también es sinónimo de resiliencia”. Puesto que, añade, “con la misma fuerza y coraje que han tomado la decisión de abandonar sus hogares para escapar de conflictos y persecuciones, apuestan por la vida mejor”.
Además “se ajustan saludablemente a las condiciones adversas y reconstruyen la historia de sus vidas desarrollando un sentido de pertenencia hacia las comunidades y sociedades de acogida, haciendo contribuciones en los diversos ámbitos de la vida social”, ilustra.
Día del Refugiado para los católicos
Para los católicos, declaran el CELAM y CLAMOR, este 20 de junio es una “especie de preludio” que les prepara también para celebrar la 107.ª Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado el próximo 26 de septiembre con el tema: “Hacia un nosotros cada vez más grande”, con el que el Santo Padre “siembra la ilusión y el compromiso de construir sociedades más inclusivas en las que, en medio de la diversidad, y conviviendo armónicamente con extranjeros, nos reconozcamos parte de una misma familia humana, pasajeros de la misma barca planetaria, donde los bienes de la creación son disfrutados sin distingos de nacionalidad, postura política, cultura o raza por todos a todos y todas. El llamado es a cuidar la naturaleza y a cuidar, acoger, promover, proteger e integrar a todo ser humano, sin distingos”.
