La situación de Cali, Colombia, sigue agravándose y la Iglesia local llama a frenar la violencia en un comunicado titulado “Ni uno más”. Según informa el Consejo Episcopal Latinoamericano, el pasado 28 de mayo resultaron fallecidas 7 personas en diversos eventos violentos ocurridos en medio de las protestas sociales que suceden en todo el país.
Ante esta oleada de violencia y muerte, el presidente Iván Duque anunció un máximo despliegue de asistencia militar de unos 7.000 soldados a la Policía Nacional en esa zona del país, que ayudarán a desbloquear las vías de comunicación.
En este sentido, en su nota, la arquidiócesis de Cali “repudia todo asesinato y llama a proteger la vida, incluso del o de los asesinos”. “Si la comunidad o quien fuere, los puede detener, deberán ser entregados a la justicia por vía ordinaria o a través de defensores de derechos humanos”, se lee en el texto en referencia al linchamiento de un policía, vestido de civil, que disparó en contra de un grupo de manifestantes.
“¡Ni uno más!”
Asimismo, el comunicado indica que tomar “la justicia por propia mano es una trampa en la defensa de la vida y de los derechos” y exhorta a no caer “en ninguna provocación”. “Cada muerto pertenece a una familia que lo espera, a un pueblo que anhela vivir en paz, con verdad y justicia, con desarme social y Estado que los garantice”, recuerda.
“Nuestra condolencia y oración por quienes han muerto o han quedado heridos. ¡NI UNO MÁS!”, concluye.
