Toda decisión está en manos del Santo Padre. Durante la rueda de prensa de presentación del mensaje del Papa Francisco para la 55ª Jornada Mundial de la Paz, no podía faltar una pregunta sobre el futuro del cardenal Peter Kodwo Appiah Turkson, prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral. ¿Seguirá siendo él quien presente el mensaje de la Jornada Mundial de la Paz de 2023?
El “superdicasterio” dirigido por Turkson
En los últimos días, de hecho, ha circulado con insistencia la noticia de la dimisión del cardenal ghanés, durante años mano derecha del Pontífice, que lo sitúa al frente del “superdicasterio” que se ocupa de aspectos centrales de la Iglesia y del magisterio del Papa Francisco en particular. Se trata de migrantes, necesitados, enfermos, excluidos, víctimas de catástrofes naturales y conflictos, desempleados, víctimas de la trata, la esclavitud o la tortura.
Un dicasterio que desde el 1 de enero de 2017 aglutina los Consejos Pontificios de Justicia y Paz (que dirigía Turkson), Cor Unum, la pastoral de los emigrantes y la pastoral de la salud, todos suprimidos. El próximo 1 de enero, por tanto, expira el plazo de cinco años de cada mandato en los órganos de la Curia Vaticana. Por ello, el cardenal Turkson ha puesto su mandato en manos del Santo Padre. “Será él quien decida si lo prolonga o lo termina”, explicó el cardenal africano de 73 años, que estuvo entre los “papables” del cónclave que eligió a Bergoglio.
Inspección
Rumores de prensa no confirmados han insistido en supuestas desavenencias en la cúpula del Departamento. En particular, entre los que dirigen las distintas secciones que se unieron tras la reforma iniciada en 2016 con la unificación de los distintos Consejos. También hay que recordar que desde el pasado mes de junio se está llevando a cabo una inspección de las actividades del Dicasterio, encomendada al arzobispo de Chicago, Mons. Blaise Cupich. El cardenal fue asistido por un equipo de tres inspectores y entregó sus conclusiones al Papa.
Precedentes
En el pasado, el Santo Padre no ha confirmado en su encargo, al término del mandato quinquenal, a otro cardenal, el prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Card. Muller. En otras situaciones, ha esperado incluso más allá de los 80 años. Este fue el caso (aunque sólo durante un mes) del cardenal Coccopalmerio, uno de los colaboradores en la redacción de Amoris Laetitia. A esa edad, de hecho, los cardenales no sólo pierden el derecho a entrar en el cónclave, sino que también dejan de ocupar cualquier cargo en la Curia. Así que sólo queda esperar la decisión del Papa.