El Papa Francisco acaba de compartir su mensaje para la Cuaresma de este año, y nos invita a reflexionar sobre el verdadero sentido de este tiempo litúrgico. Este es un buen momento para pedir oraciones por el Papa, para que el Señor le dé consuelo y fortaleza en su labor pastoral, especialmente en su estado de salud. Comencemos dedicando un rato a rezar por él y por la Iglesia.
El mensaje del Papa tiene como lema «Caminemos juntos en la esperanza». Este es un título sencillo, pero cargado de significado, que nos invita a reflexionar sobre tres aspectos fundamentales: caminar, juntos y esperanza.
Caminar
La vida es una peregrinación hacia el cielo, y la Cuaresma forma parte de este viaje hacia la Pascua. En el camino, enfrentamos dificultades: hambre, frío, cansancio, dolor. De igual manera, en la vida cristiana enfrentamos desafíos. El Papa nos invita a preguntarnos si estamos caminando cómodamente en una zona de confort o si, por el contrario, nos hemos comprometido a ayudar al prójimo. El Evangelio nos enseña: “Si alguien te pide que camines una milla, acompáñalo dos” (Mt 5,41). No se trata solo de ayudar esporádicamente, sino de acompañar al otro en su camino.
Juntos
El Papa reflexiona sobre la importancia de la convivencia con los demás, especialmente aquellos con los que compartimos nuestra vida: familiares, amigos, compañeros de trabajo. A menudo, nos preocupamos por nuestras propias necesidades espirituales, pero ¿cómo ayudamos a los que están cerca de nosotros? Quizás nuestra misión sea llevarlos a Cristo, de una manera paciente y sin prisa, respetando los tiempos de Dios, pero siendo conscientes de que nuestra vida cristiana no debe estar limitada solo a nuestras preocupaciones.
Esperanza
El Papa, citando el Catecismo de la Iglesia, nos recuerda que la esperanza es el “ancla del alma”. Esta esperanza nos sostiene, sabiendo que vamos hacia la gloria eterna. Pero también es importante vivir esta esperanza activamente, como una disposición del alma que nos impulsa a actuar. No solo esperamos el cielo, sino que también esperamos la venida de Cristo, sabiendo que Él regresará en su gloria. Vivir con esperanza significa hacer todo lo posible para que Cristo reine en nuestra vida y en nuestro entorno. Hablar de Cristo como Rey no debe ser algo extraño, sino una realidad vivida, especialmente en nuestras parroquias.
Este mensaje del Papa Francisco para la Cuaresma de 2025 es una invitación a aprovechar este tiempo de gracia para reflexionar, acompañar y vivir con esperanza activa. Que podamos compartir esta reflexión y vivir una Santa Cuaresma, caminando juntos hacia la Pascua.
Que el Señor nos bendiga en este tiempo de preparación y renovación espiritual.