El pasado 2 de mayo de 2021, se llevó a cabo en la iglesia Nuestra Señora de la Candelaria, santuario de José Gregorio Hernández de la arquidiócesis de Caracas, Venezuela, la Ceremonia de Inhumación de los restos mortales del beato José Gregorio Hernández Cisneros y su traslado al nuevo monumento dentro de la Iglesia.
José Gregorio Hernández, conocido como el médico del pueblo, fue proclamado beato el 30 de abril de 2021 en la capital venezolana.
Reconocimiento y verificación
Tal y como informa una nota de la Conferencia Episcopal Venezolana, antes de la Misa de Acción de Gracias, se llevó a cabo el reconocimiento de la osamenta y la verificación del acta contentiva que se introduce dentro del sarcófago. El acto tuvo lugar en un salón privado, donde permanecían resguardadas.
En dicho espacio, se encontraban el cardenal Baltazar Porras, arzobispo de Mérida y administrador apostólico de Caracas, monseñor Tulio Ramírez, obispo de Guarenas y vicepostulador de la causa de Beatificación; la licenciada María Coromoto Bianchini, notario actuario, el licenciado Carlos Marrero, notario adjunto; el presbítero Juan Carlos Silva Unda, promotor de Justicia; y el presbítero Gerardino Barranchini, párroco de la iglesia la Candelaria.
Tras la verificación de las reliquias y osamentas, procedieron a la firma del acta y a sellar las cajas que contienen los restos, asegurándolos con una cinta amarilla. Los notarios trasladaron las cajas de cristal hasta la Iglesia donde introdujeron los restos en el sarcófago de madera de caoba.
Misa de Acción de Gracias
Poco después comenzó la Eucaristía de acción de gracias, presidida por el cardenal Baltazar Porras junto a monseñor Tulio Ramírez y demás sacerdotes concelebrantes. Al finalizar la Misa, los restos fueron trasladados al monumento nuevo, ubicado en el lado lateral izquierdo de la iglesia, donde quedaran expuestos para su veneración.
El diseño de este nuevo monumento fue realizado por el arquitecto Gregory Vertullo y la urna de madera por el ebanista José Antonio Moreira.
Ese mismo domingo 2 de mayo, el Papa Francisco recordó al recién proclamado beato José Gregorio Hernández Cisneros tras el rezo del Regina Coeli: “Era un médico lleno de ciencia y de fe. Supo reconocer en los enfermos el rostro de Cristo y, como el Buen Samaritano, los ayudaba con caridad evangélica”.
