Actualmente es estudiante en la Universidad Pontificia de la Santa Cruz (Roma) donde cursa la Licenciatura de Comunicación Social Institucional. Es la primera religiosa de su congregación en realizar estos estudios para la evangelización de su país. Esta misionera cuenta su testimonio de vocación y de cómo los cristianos viven como una minoría en la India.
Educada en el seno de una familia católica india
Nació el 20 de mayo 1989 en la India, en Torpa, estado de Jharkhand, en el seno de una familia católica. Creció en un ambiente cristiano y estudió en una escuela católica con sus hermanos, junto a alumnos de otras religiones. En un entorno tribal, de educación cristiana, creció en casa con sus padres. Pronto decidió unirse a la Congregación de las Hijas de santa Ana (DSA), una institución fundada en la India.
«Ésta es una congregación muy familiar para mí, pues estudié en su escuela. Después del bachillerato, cuando tenía 17 años, sentí una llamada especial para entrar a la vida religiosa. En realidad lo deseaba de niña, pero ver a las hermanas me inspiró a querer ser como ellas. De vez en cuando, cuando iba a Misa en la parroquia, observaba la vida y servicio de las monjas. Allí nació la semilla de mi vocación», comenta Alice.
Al servicio de las necesidades de la iglesia local india
Recibió formación para entrar en su congregación en 2006, durante tres años y medio. Después realizó sus primeros votos en 2009. Tras una experiencia de ocho años de vida religiosa, aprendió todas las actividades y apostolados, consagrándose al Señor con votos perpetuos en 2017.
«Mi Congregación fue erigida en Ranchi el 26 de julio de 1897 por el arzobispo Paul Goethals en respuesta a la situación y las necesidades de la Iglesia local contemporánea. Es una congregación india reconocida por el derecho pontificio. Nuestro carisma es ‘Mejor servicio con el amor de Jesús’, ya que hemos sido llamadas especialmente a anunciar la Buena Nueva a los mansos, a curar a los enfermos, a servir a los pobres y oprimidos, a trabajar por la educación de los niños y las mujeres, y a prestar cuidados especiales para ayudar a otras personas en su viaje eterno al cielo», destaca la hermana Alice.
Evangelización, educación, enfermería y trabajo social
Para el cumplimiento de este objetivo, «Dios nos ha dotado de dones especiales. Trabajamos en cuatro apostolados: evangelización, educación, enfermería y trabajo social. Estamos presentes en Italia, Alemania y la India. Nuestra sede está en Ranchi, en el estado de Jharkhand, India. Este estado, situado al este de la India, es conocido por sus singulares comunidades tribales, cada una con su propia cultura, tradiciones y modo de vida. Concretamente, el estado alberga varias tribus importantes, como los santhal, los munda, los oraon, los kharia y los ho, cada una de las cuales contribuye al rico tapiz del patrimonio indígena», nos cuenta Alice.
La expansión de la Iglesia entre las tribus
Las culturas tribales de Jharkhand están profundamente arraigadas en la conexión con la naturaleza, y esto se hace evidente en sus prácticas tradicionales, que son parte integrante de las expresiones culturales indias. Las fiestas de diversa índole desempeñan un papel crucial en la vida tribal, como ocasiones de la reunión comunitaria y o de la observancia religiosa.
La hermana Alice Topno repasa la historia: «En 1885, el P. Constant Lievens, S.J., el gran apóstol de Chotanagpur, desembarca en Ranchi como misionero celoso. La llegada de este jesuita belga marca el comienzo de la gran expansión de la Iglesia entre las tribus de la meseta de Chotanagpur. Los cristianos son minoría en la India y también en Jharkhand. Viven juntos y comparten su vida común con los demás; la belleza de esta unidad en la diversidad se practica bien».
El estilo de vida de las comunidades tribales indias
El estilo de vida de las comunidades tribales de Jharkhand gira en torno a la agricultura, la silvicultura y la artesanía tradicional. Las tribus practican la agricultura itinerante, en la que rotan sus parcelas agrícolas para mantener la fertilidad del suelo. El uso de técnicas agrícolas tradicionales y la dependencia de los recursos locales ponen de relieve su enfoque sostenible de la vida.
Además de la agricultura, la artesanía es una parte importante de la economía tribal. Estas expresiones artísticas no sólo sirven como medio de vida, sino que también transmiten su identidad cultural de generación en generación. Las comunidades tribales de Jharkhand siguen una estructura social muy unida, con fuertes lazos dentro de la comunidad. El consejo de la aldea, conocido como «Panchayat«, desempeña un papel clave en la resolución de disputas y la toma de decisiones de la comunidad.
Los retos del Estado de Jharkhand
Las comunidades tribales tienen una responsabilidad colectiva con cada uno de sus miembros, lo que fomenta un sentimiento de unidad y apoyo mutuo. Además, Jharkhand posee más del 40 % de los recursos minerales de India, pero el 39,1 % de su población está por debajo del umbral de pobreza y el 19,6 % de los niños menores de cinco años están desnutridos. Jharkhand es principalmente rural, y cerca del 24 % de la población vive en ciudades.
«Nos enfrentamos a retos como el desplazamiento debido a la industrialización y la deforestación, la pobreza, la emigración a las grandes ciudades, etcétera. Se están haciendo esfuerzos para equilibrar el desarrollo con la preservación de las culturas indígenas, garantizando que perduren las tradiciones y estilos de vida únicos de nuestras tribus», matiza Alice.
Su rico patrimonio cultural, sus vibrantes festivales, su estilo de vida sostenible y sus expresiones artísticas contribuyen significativamente al diverso mosaico del paisaje cultural indio. Los esfuerzos para preservar y celebrar estas tradiciones son fundamentales para mantener la identidad única de nuestras comunidades tribales.
La primera misionera de su congregación en Roma
Su congregación trabaja entre comunidades tribales y ha sentido la necesidad de hacer realidad su visión y su labor de evangelización en la era de los nuevos medios de comunicación.
Es precisamente por eso que se encuentra en Roma estudiando Comunicación Institucional, pues la Congregación decidió hacer crecer el apostolado de la evangelización, viendo la necesidad de la sociedad y de la Iglesia en la India. Es la primera vez que se toma semejante iniciativa para crecer en este campo y es la primera que está haciendo estos estudios.
Está convencida de que la formación recibida en Roma la ayudará a trabajar muy bien y eficazmente dentro del Instituto y también fuera, especialmente para la Iglesia local, en el campo de la evangelización entre la población tribal y sobre todo con los jóvenes.
Alice concluye con una sonrisa: «Agradezco sinceramente a los benefactores toda su ayuda: siempre están en mis oraciones».