El Papa Francisco continúa recibiendo tratamiento en el hospital Gemelli por una infección polimicrobiana, pero su compromiso con la paz y la solidaridad no disminuye.
A pesar de su estado de salud, ha mantenido comunicación diaria con la parroquia de Gaza, realizando videollamadas con el padre Gabriel Romanelli y los refugiados. El Papa les ha enviado su bendición, preguntando por su bienestar y expresando su apoyo.
Además, en un reciente mensaje escrito, agradeció las oraciones y el acompañamiento de quienes lo apoyan. A pesar de las dificultades, su misión sigue intacta, y espera continuar su trabajo pastoral una vez recupere fuerzas.
La Oficina de Prensa del Vaticano ofrece actualizaciones sobre la salud del Pontífice hospitalizado en el Policlínico Romano: “Los resultados de las pruebas realizadas en los últimos días y hoy han demostrado una infección polimicrobiana del tracto respiratorio que ha obligado a modificar aún más la terapia. Todas las pruebas realizadas hasta el momento son indicativas de un cuadro clínico complejo que requerirá de un internamiento hospitalario adecuado”.
El Papa queda por tanto «bajo control del hospital», reiteró el portavoz, informando que de momento no hay previsiones sobre su alta hospitalaria y que al Papa se le aplica la regla del «absoluto reposo» establecida por los médicos, por eso ayer a las 12.00 no pudo dirigir – por primera vez – el rezo del Ángelus dominical.