Chiapas desgarrado por el crimen organizado

En estos tiempos de crisis frente a la violencia estructural e institucional con la presencia de la delincuencia organizada que lacera la vida de nuestras comunidades y nuestros pueblos de Chiapas estamos sufriendo los asesinatos, secuestros, desapariciones, amenazas, hostigamiento, extracción de nuestros bienes naturales, persecución y despojos de los bienes, fruto de nuestro trabajo. Los grupos delincuenciales se han apoderado de nuestro territorio y nos encontramos en estado de sitio, bajo psicosis social con narco bloqueos, que usan come barrera humana a la sociedad civil, obligándolos a estar y poner en riesgo su vida y la de su familia.

De frente a esta realidad tan dolorosa, la iglesia promotora de la dignidad de la persona, servidora de la vida del ser humane y defensora de sus derechos, predica su liberación, una liberación que tiene, por encima de todo, el respeto a la dignidad de la persona, la promoción del bien común del pueblo y la trascendencia que mira ante todo a Dies y solo de Dies deriva su esperanza y su fortaleza.

Como iglesia diocesana y sociedad civil se ha denunciado permanentemente la crisis social, la represión y la presencia de grupos criminales, sin embargo, no ha habido respuesta para los pueblos, el silencio de las autoridades pone en riesgo la integridad humana y nos demuestra un estado fallido y rebasado y/o coludido con las grupos delincuenciales, desde los fiscales municipales y regionales, presidentes municipales, el gobierno del estado y federal.

La omisión del estado de frente a esta realidad mantiene a los pueblos en la incertidumbre total. Hacemos un llamado a la comunidad internacional a visibilizar la situación de violencia que se ha perpetrado en nuestro Estado de Chiapas y que las autoridades correspondientes respondan brindando seguridad al pueblo.

Denunciamos:

  • Amenazas, hostigamiento, persecución e intimidación a la sociedad
  • La presión y control social, político y psicológico de diferentes grupos para que el pueblo tomen partido por uno o por otro grupo criminal.
  • La manipulación política que se ejerce para brindar atención desde los servicios básicos hasta otros, a los que el pueblo tiene derecho.
  • El despojo de sus bienes, fruto de su esfuerzo y su trabajo.
  • El desabasto de alimentos, granos básicos y otros enseres, así como la falta de atención médica Y medicamentos, debido a la continua violencia.
  • La falta de atención de las autoridades de los tres niveles de gobierno a las demandas del pueblo.
  • Los reclutamientos forzados, dejando a las familias
  • El control del territorio, saqueo, extracción y explotación minera y cobra por «derecho de piso» y «de paso» (extorsión) violentando los derechos humanos y comunitarios.
  • El ingreso de personas armadas en nuestras comunidades y pueblos.

Responsabilizamos de los hechos ocurridos a los tres niveles de gobierno que han hecho caso omiso a las denuncias de la sociedad civil, y exigimos:

La atención urgente a los casos de violencia e inseguridad que esta destruyendo la vida de nuestros pueblos.

Atender las denuncias de la sociedad civil, girar y ejecutar de manera inmediata las órdenes de aprehensión de los lideres de estos grupos delincuenciales.


Que se respeten los centros educativos, libres de violencia Restablecer el orden social sin vulnerar a la sociedad civil.

Que se haga valer el estado de derecho para nuestros

Animamos el corazón de las familias de nuestras comunidades y pueblos que sufren en carne propia esta realidad, nos unimos y solidarizamos con las victimas. Que el Espíritu de Dios presente y actuante en el caminar de su pueblo sea nuestra esperanza y fortaleza en estos momentos de crisis y de profundo dolor.

Nuestros Pueblos no son Campo de Batallas

La paz es un grito que merece ser escuchado (Papa Francisco)

Rodrigo Aguilar Martínez Obispo de San Cristóbal de las Casas

Luis Manuel López Alfaro Obispo Auxiliar