Los obispos de la Conferencia Episcopal de Ecuador se han sumado a la campaña de promoción de la vacunación de la ciudadanía, a la que exhortan a vacunarse en los lugares asignados por las instituciones públicas y cuyo beneficio “es personal y social”.
En su llamado, los prelados del Consejo de Presidencia del Episcopado expresan que, desde hace más de un año, la sociedad mundial ha estado sometida a una gran crisis causada por la pandemia de COVID-19, que ha “causado dolor, lágrimas, muertes y sufrimiento”. No existe, manifiestan, “una familia que no haya sufrido en carne propia los efectos de este mortal virus”.
Vacunación, salida de la crisis
El Episcopado ecuatoriano describe el proceso de vacunación como una “luz de salida a esta crisis”, y cita las palabras del Papa Francisco al respecto: “Creo que éticamente todo el mundo debería vacunarse. Es una opción ética, porque te juegas tu salud, tu vida, pero también te juegas la vida de los demás”.
Del mismo modo, los prelados declaran que “la vacuna gestionada por las instituciones públicas y privadas es un signo de esperanza para superar la crisis social y económica desatada por la pandemia; un gran esfuerzo digno de gratitud y felicitación”.
