El Papa Francisco prosigue su convalecencia con avances paulatinos, según la última actualización ofrecida por la Oficina de Prensa de la Santa Sede este martes 8 de abril. Desde su residencia en Casa Santa Marta, el Pontífice mantiene una evolución positiva tras haber sido hospitalizado por una infección respiratoria de tipo polimicrobiano que derivó en una neumonía bilateral.

La comparecencia pública del Papa el pasado domingo 6 de abril, durante la celebración del Jubileo de los Enfermos y Trabajadores Sanitarios, fue recibida con sorpresa y esperanza por los fieles. Aunque su presencia fue breve, bastaron unas palabras y una bendición para confirmar que su estado general continúa en la senda de la recuperación. “Feliz domingo, muchas gracias”, expresó con serenidad.

Según el parte médico más reciente, Francisco presenta progresos clínicos estables: su movilidad mejora gradualmente, al igual que su capacidad respiratoria y su voz. Aunque aún necesita apoyo respiratorio, el uso de oxígeno ha disminuido durante el día, limitándose a una oxigenación de alto flujo solo por la noche, en función de sus necesidades.

Activo en lo esencial

A pesar de la convalecencia, el Santo Padre no ha interrumpido su labor pastoral y de gobierno. Continúa al tanto de los asuntos eclesiales, recibe documentación de diversos dicasterios y mantiene contacto telefónico con personas e instituciones. El lunes, incluso, recibió en su residencia al Cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado del Vaticano.

Además, el Papa sigue celebrando la Eucaristía diaria desde la capilla privada del segundo piso de Casa Santa Marta y ha mantenido su cercanía con la comunidad cristiana de Gaza, con la que ha estado en contacto a través de llamadas telefónicas a la parroquia de la Sagrada Familia.

Semana Santa: prudencia y esperanza

Aunque la próxima Audiencia General, prevista para el miércoles 10 de abril, ha sido cancelada, se espera que el mensaje preparado por el Papa sea difundido a través de los medios vaticanos, tal como se ha hecho en otras ocasiones durante su convalecencia.

La Oficina de Prensa ha señalado que, por el momento, no se ha tomado una decisión definitiva sobre su participación en las liturgias de Semana Santa, aunque no se descarta que pueda estar presente de algún modo, dependiendo de cómo evolucione su estado de salud en los próximos días.

Una nueva actualización médica está prevista para el viernes 11 de abril.