Nueva Generación de Cardenales: Unidad y Humildad en el Consistorio del Papa Francisco

Ceremonia en la Basílica de San Pedro: Un Llamado a la Humildad y Servicio

Desde la Basílica de San Pedro, el Papa Francisco presidió la ceremonia de creación de 21 nuevos cardenales, instándolos a rechazar la tentación del prestigio y el poder, y a centrarse en Jesús como el verdadero fundamento de sus vidas. La ceremonia, marcada por la solemnidad y el espíritu de Adviento, congregó a 5,500 fieles que presenciaron este importante evento eclesiástico.

Un Llamado a la Unidad

La palabra «unidad» resonó en toda la ceremonia. El ex nuncio apostólico Angelo Acerbi, de 99 años, en sus palabras introductorias, enfatizó la necesidad de «caminar juntos» como se discutió en el reciente sínodo. Destacó el anhelo común de paz en un mundo afectado por desigualdades, guerras y pobreza, señalando la Encíclica «Dilexit nos» como una inspiración para el trabajo pastoral de los nuevos cardenales.

Humildad y Fraternidad: Pilares del Magisterio del Papa Francisco

En su homilía, el Papa Francisco reiteró uno de los pilares de su magisterio: la importancia de la humildad y la fraternidad sobre la búsqueda de posiciones de poder. Citando a Manzoni en «Los novios», el Papa recordó que nuestros corazones pueden ser un «lío», propensos a la fragilidad y la desorientación. Llamó a los nuevos cardenales a reflexionar sobre la dirección de sus corazones y a asegurarse de que están en el camino correcto, centrados en Cristo.

El Camino de Jesús: Volver al Centro

El Papa Francisco exhortó a los nuevos cardenales a seguir el camino de Jesús, poniendo a Cristo en el centro de sus vidas y ministerios. Recordó las enseñanzas de San Agustín sobre el «retorno al corazón», enfatizando la necesidad de centrarse en lo esencial y no en lo superfluo. El Pontífice utilizó la metáfora del «perno» para ilustrar cómo Cristo debe ser el soporte y centro de gravedad de sus vidas.

Servicio y Encuentro

El Papa subrayó que el cardenalato no es un llamado al aislamiento, sino a la inmersión en la vida de las personas, atendiendo sus heridas y luchas. Recordó las palabras del clérigo italiano Mazzolari sobre la necesidad de «caminar por las calles» y actuar sin filtros, advirtiendo que el cansancio puede corromper el corazón. Francisco instó a los cardenales a dejarse guiar por la alegría del encuentro con los demás y el cuidado de los más frágiles.

La Búsqueda de la Unidad

En su discurso, el Papa advirtió contra la «carcoma de la competencia» que puede destruir la unidad dentro del grupo de los discípulos. Exhortó a los cardenales a derribar los muros de la enemistad y a ser promotores de la fraternidad y la comunión, siguiendo el ejemplo de San Pablo VI. Subrayó que, en un mundo marcado por la competencia corrosiva y la obsesión por las apariencias, su misión es ser constructores de unidad.

Representación de América Latina

Entre los nuevos cardenales, cinco provienen de América Latina: Carlos Gustavo Castillo Mattasoglio (Perú), Vicente Bokalic Iglic (Argentina), Luis Gerardo Cabrera Herrera (Ecuador), Fernando Natalio Chomali Garib (Chile) y Jaime Spengler (Brasil). Con estas nuevas incorporaciones, el Colegio Cardenalicio cuenta ahora con 253 cardenales, de los cuales 140 son electores y 113 no electores.


La ceremonia fue un recordatorio de la importancia de la humildad, la unidad y el servicio en la vida de la Iglesia, y un llamado a los nuevos cardenales a seguir el camino de Jesús con dedicación y amor.