Lectoescritura

Como enseñar a leer y escribir a los niños

La palabra “lectoescritura” pretende ser constructo que es en sí mismo absurdo y que no existe en la realidad.

Existen dos procesos (lectura y escritura) íntimamente relacionados, y que en su aprendizaje uno precede al otro. Aquí sí sabemos que el huevo es anterior a la gallina.

Es necesario aprender a leer antes de poder escribir.

Fíjese bien que en la frase anterior no he usado el verbo “aprender” antes de “escribir”.

Se puede aprender a escribir a la vez que se aprende a leer, pero no se podrá escribir si no se sabe leer.

Lo contrario si es posible: se puede leer sin saber escribir.

Una prueba de que el pretendido constructo “lectoescritura” es una invención absurda, es el hecho de que ese palabro, que no llega a ser un concepto, no existe en ningún otro idioma. Al menos no existe en inglés, ni en francés, ni en alemán, ni en italiano, ni en portugués, que utilizan el término “alfabetización” cuando se fuerza a usar la traducción de “lectoescritura”, pero en ningún caso aceptan “readwriting”, ni “lecturècrire”, ni “lesenschreiben”, ni “lettuscrivere”, ni “leiturescrita”.


Todos esos idiomas separan ambas funciones (porque son dos funciones diferenciadas y aunque estén relacionadas no se pueden unir). En cada uno de esos idiomas al referirse tanto las funciones como su enseñanza se separan por la conjunción Y:

  • En inglés: Reading and writing.
  • En francés: lire et écrire.
  • En alemán: Lesen und schreiben.
  • En portugués: ler e escrever.

¿Qué problema existe en que juntemos los dos conceptos?, pues que lleva a confusión en su labor a algunos profesores cuando están enseñando a leer y a escribir.

En no pocas ocasiones me he encontrado maestros que creen que están enseñando a leer cuando piden al niño repasar o copiar letras o palabras. Dicen “estoy enseñando lectoescritura” pero como no existe esa función eso no es posible. Solo están enseñando las bases de la escritura. Perdón por escribir “solo”. Están enseñando las bases de la escritura.

En mi día a día es enormemente frecuente que los padres digan que el niño tiene problemas en “lectoescritura” (es lo que les han dicho en el colegio, a un lego en la materia no se le hubiera ocurrido semejante tontería). Entonces, ¿le están enseñando a leer o a escribir?, ¿en qué tiene problemas, en una u en otra función ?, ¿o en ambas? ¿y es un mismo problema para ambas funciones o cada una tiene unas dificultades diferentes?

Los test de “lectoescritura” inevitablemente evalúan ambas funciones de manera independiente. No se puede evaluar la “lectoescritura” porque no existe como función unificada. Se evalúa la lectura por un lado y la escritura por otro. Se analiza en qué nivel está cada uno y, si es pertinente, se establece cuáles son los síntomas en cada función y siempre que se pueda cual es el origen de la mismos, pero de manera diferenciada para cada uno.

Me parece muy importante hablar con propiedad, particularmente cuando estamos hablando de la enseñanza del uso de un idioma a los niños.

Hablar de las bases de la enseñanza del español utilizando una palabra que no tiene sentido me parece un muy mal comienzo.